El vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, pidió este sábado que se terminen «las políticas inútiles y las medidas inservibles» aplicadas en España ya que, según aseguró, con el PP «un calambre de cambio recorre en estos momentos España».
Durante su intervención en una convención celebrada en Islantilla (Huelva) de cargos electos y candidatos del partido en Huelva, el ‘popular’ pidió políticas «sensatas», algo para lo que, apuntó, «tienen que marcharse socialistas y volver populares».
«Al PP se le atribuye una extraordinaria responsabilidad, por que vamos a ganar, tenemos un programa de gobierno, y lo que prometamos vamos a tener que cumplirlo», aseveró González Pons.
En esta línea, espetó al Gobierno que «los españoles están cansados de promesas vacías de políticos vacíos», y perfiló a los populares como «los políticos del renacimiento después de la crisis», una circunstancia que «ha llevado a reconversión de sector financiero, del mercado laboral, de la industria tradicional, del sector del comercio, de medios de comunicación, y también tiene que ser una reconversión de los políticos».
Igualmente, González Pons definió la política de Rodríguez Zapatero como «una política de engaño y división» que ha provocado una sociedad «más separada por la Memoria Histórica y menos unida para el futuro». «En vez ocuparse por la I+D en educación, en economía o en las inversiones, se ha preocupado de aplicar un programa ideológico que ha dividido a los españoles», criticó el popular.MEDIDAS DE BRUSELAS Y DE WASHINGTON
Por otro lado, el vicesecretario de Comunicación del PP aseguró que el director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss-Kahn, ha venido a España para «dar el aprobado» a Zapatero por unas reformas que «no convienen» al país.
Así, afirmó que el Gobierno está llevando a cabo «ahora» las reformas que le ordenan desde Bruselas y Washington, «y no las que España necesita y quiere desde hace mucho tiempo».
En este sentido, reiteró que el plan de ajuste del Ejecutivo viene marcado por «el conjunto de Europa y Estados Unidos», porque como «son los que están ordenando desde fuera» las reformas que se deben hacer aquí. Además, dijo que no sólo están ordenando las reformas, sino que «vienen a ver si se están haciendo».
«A la Unión Europea le puede parecer aceptable las reformas de Zapatero y a Estados Unidos razonable la contribución de Zapatero a la estabilidad del euro porque ayuda a que se mantenga el dólar, pero a los españoles no les conviene lo que se está haciendo porque Zapatero se ha empeñado en facilitar el despido y no la creación de empleo», afirmó.
