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Propiedades de las sardinas
beneficios de comer sardinas a diario
Las sardinas no son el alimento más sabroso que se puede consumir, así que o te gusta o no te gusta. Sin embargo, si no eres un fanático, puedes considerar darle otra oportunidad a las sardinas, ya que aparentemente son buenas para la salud.
Descubre cómo añadir sardinas a tu dieta puede proporcionarte unos ojos y un sistema inmunitario más sanos, un menor riesgo de cáncer y mucho más en esta guía de salud. También hemos añadido algunas ideas deliciosas sobre cómo puedes disfrutarlas en tu alimentación habitual.
A diferencia de otros pescados, las sardinas tienen un bajo contenido de contaminantes y metales pesados, como el mercurio, porque se encuentran en la parte inferior de la cadena alimentaria. Además, se alimentan de plancton, ¡lo que las convierte en uno de los pescados más seguros para comer!
Las sardinas no sólo son seguras para el consumo, sino que también son increíblemente ricas en nutrientes importantes. Su impresionante contenido nutricional ofrece increíbles ventajas para la salud, que pueden resultarle interesantes, especialmente si tiene objetivos de salud y estado físico. Echa un vistazo:
El pescado es bien conocido por su rico contenido en omega-3, y las sardinas son súper densas en este ácido graso esencial. Se ha descubierto que los omega-3 ayudan a promover la salud del corazón, a combatir la ansiedad y la depresión, a reducir los síntomas del TDAH en los niños e incluso a prevenir el riesgo de cáncer.
riesgos para la salud de las sardinas en conserva
Las sardinas son un alimento increíblemente versátil. Pueden servirse en pan como sándwich, cocinarse con verduras como plato, o comerse con arroz como una comida por sí sola. “Son (las sardinas) una buena fuente de ácidos grasos omega-3 (grasa buena) y pocos alimentos son tan ricos en vitamina B12”, comparte Magdalin Cheong, dietista jefe de
colesterol. Se ha demostrado que esta propiedad ayuda a reducir el riesgo de formación de coágulos y disminuye la presión arterial, reduciendo así los riesgos cardiovasculares. Según la Asociación Americana del Corazón, el consumo recomendado de pescado graso a la semana es de 2 raciones para cubrir nuestras necesidades de omega-3 -una ración es de unos 100 g cocidos, lo que viene a ser aproximadamente una porción del tamaño de la palma de la mano.Las sardinas son también una excelente fuente de vitamina B-12, que ayuda al bienestar cardiovascular y aporta energía.2. Buenas para la salud de los huesosComo las sardinas se comen enteras, junto con sus pequeñas espinas, aportan una gran cantidad de calcio. Esto las convierte en una buena opción para quienes tienen intolerancia a la lactosa, son alérgicos a los lácteos o necesitan más calcio en su dieta.Las sardinas también son ricas en vitamina D, que ayuda a aumentar la absorción de calcio por parte del organismo. Para mantener unos huesos fuertes, se aconseja a los adultos en orden que se propongan una ingesta de 1000 mg de calcio al día. Una ración de 90 g de sardinas proporciona aproximadamente el 43% de las necesidades diarias de calcio.3. Rico en mineralesAdemás de ser ricas en vitaminas del calcio, las sardinas contienen una serie de minerales beneficiosos como:4. Desarrolla los músculos y mantiene fuerte la inmunidadLas sardinas también están repletas de proteínas, esenciales para el crecimiento y la reparación de las células y los músculos. Las proteínas también ayudan a mantener fuerte nuestro sistema inmunitario.Precaución de salud al comer sardinasLas personas con problemas renales o
sardinas salvajes del planeta
No te desanimes todavía. Las sardinas podrían convertirse en tu nuevo mejor amigo. Son una de las mejores fuentes de ácidos grasos omega-3, lo que significa que pueden reducir tus niveles de triglicéridos y colesterol. Favorecen la salud del corazón y los huesos con buenas dosis de vitamina D y B12. Están cargadas de proteínas que ayudan a reforzar el sistema inmunitario. Y la grasa saludable de las sardinas es buena para el cerebro, lo que puede prevenir la enfermedad de Alzheimer y la demencia.
¿Por qué elegir las sardinas en lugar del viejo atún? La mayoría de los expertos no recomiendan el atún por su alto contenido en mercurio. En su lugar, piensa en el acrónimo SMASH, que significa salmón, caballa, anchoas, sardinas y arenque. Esas son tus mejores opciones.
“Los pescados con alto contenido de grasas omega-3 y bajo contenido de mercurio, como las sardinas y el salmón, son buenas opciones para ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo”, dice la especialista en medicina funcional Elizabeth W. Boham, MD, MS, RD, de The UltraWellness Center. “Obtener más grasas omega-3 en su dieta de estos pescados y linaza molida puede ayudar a bajar la inflamación en su cuerpo”.
wikipedia
Craig Cooper, un millonario cincuentón conocido por ser capitalista de riesgo, empresario, autor, aventurero y presentador de televisión, atribuye sus “mejores décadas” hasta el momento (como en sus 40 y 50 años) a comer sardinas, según un reportaje de la CNBC de 2016.
Junto con este interesante (o supongo que debería decir pesquero) hábito alimenticio, Cooper es un gran creyente en el ejercicio regular (aunque no se ejercita en un gimnasio real) y en tomar siestas energéticas de 22 minutos con el fin de impulsar su productividad.
Por supuesto, el ejercicio regular es clave para la salud y el bienestar general. Y los estudios realizados por investigadores de la Universidad de Tokio y publicados por los Institutos Nacionales de la Salud (NIH) encontraron pruebas que sugieren que hacer siestas cortas (en lugar de largas) puede estar asociado con una menor incidencia de enfermedades cardiovasculares. Además, los investigadores descubrieron que las siestas de menos de 30 minutos pueden aumentar el estado de alerta y las habilidades motoras.
Las sardinas pueden situarse en la misma categoría que las anchoas. Ambos tipos de pescado son salados, aceitosos, picantes y suelen estar envasados en latas. Tanto las sardinas como las anchoas suelen ser muy saladas, porque se utiliza sal para conservarlas antes de enlatarlas. Tanto las sardinas como las anchoas son originarias del Mediterráneo, pero las sardinas son más grandes que las anchoas y pertenecen a la familia del arenque. Las anchoas pertenecen a la familia Engraulidae. Hay quien dice que las sardinas son menos picantes que las anchoas.