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Historia de la habana vieja cuba
La habana en español
El presente trabajo aborda la refuncionalización turística del Casco Antiguo de La Habana, marcada por dos hechos fundamentales: la declaración del Centro de la Ciudad (La Habana Vieja) y su Sistema de Fortificaciones como Patrimonio Cultural de la Humanidad por parte de la UNESCO en 1982, hecho que otorgó visibilidad internacional al conjunto arquitectónico, y la decisión gubernamental de desarrollar el turismo cultural en esta zona a partir de 1993, convirtiendo estos sitios históricos en atractivos para la comercialización y agravando las contradicciones socio-espaciales. El estudio, que comprendió una revisión bibliográfica, una investigación documental y un análisis de resultados empíricos, tuvo como objetivo evaluar la renovación del paisaje urbano, el desplazamiento de una parte de la población de bajos ingresos, la llegada de la clase media cubana y la revalorización de la vivienda, aunque informal. Estos hechos ponen de manifiesto que se está produciendo un creciente proceso de gentrificación en el Centro Histórico de La Habana Vieja.
La turistificación de algunos centros históricos de América Latina se ha relacionado con el hecho de que fueron designados Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO). Esto ha puesto de relieve la relación entre el patrimonio mundial y el turismo como una lógica integrada de visibilidad y consumo de esos lugares. La declaración de la UNESCO asegura la notoriedad internacional de los sitios, agrega valor económico a los bienes y atrae tanto a las inversiones como a los turistas; así sucedió con las ciudades latinoamericanas que cuentan con sitios del Patrimonio Cultural de la Humanidad (DELGADILLO, 2015).
El lenguaje de cuba
1Las representaciones actuales de la cultura tangible e intangible en la imagen de la ciudad de La Habana forman parte de una nueva política de identidad en Cuba que comenzó en 1994 con los primeros esfuerzos de planificación de la ciudad.1 Las representaciones son el producto de un proceso histórico y político, un programa de selección, supresión y omisión deliberada que expresa una “elección patrimonial interpretativa” (Bhabha 2006: 9). Retomo el concepto de Homi Bhabha para analizar las nuevas dinámicas de valoración y devaluación en el marco de las producciones patrimoniales en La Habana desde 1994, y considerar lo que significa, en términos concretos, “apropiarse” o “alienar” (Bhabha 2006: 9) representaciones específicas de culturas y sociedades según los contextos históricos, sociales y científicos dominantes.
2¿Hasta qué punto los lugares y objetos que la UNESCO denomina Patrimonio Cultural de la Humanidad son producto de una mezcla de ciencia y política, conocimiento y poder? ¿Hasta qué punto representan restos de lo que se creó mediante procesos de colonización o, en otras palabras, hasta qué punto la erudición, en particular la antropología y la historia, ha informado sobre lo que se declara digno de ser conservado y presentado? ¿Hasta qué punto este “patrimonio cultural” elegido puede atribuirse a las políticas científicas y culturales, incluidas las de la propia UNESCO (cf. Csáky 2005; Pichler y Kreff 2009)?
La habana moneda de cuba
La Habana (/həˈvænə/; español: La Habana [la aˈβana] (escuchar)) es la capital y mayor ciudad de Cuba. La Habana, corazón de la provincia de La Habana, es el principal puerto y centro comercial del país[4]. La ciudad tiene una población de 2,1 millones de habitantes,[5][4] y se extiende por un total de 781,58 km2 (301,77 millas cuadradas), lo que la convierte en la mayor ciudad por superficie, la más poblada y la cuarta área metropolitana de la región del Caribe[5][6].
La ciudad de La Habana fue fundada por los españoles en el siglo XVI, y debido a su ubicación estratégica sirvió de trampolín para la conquista española de las Américas, convirtiéndose en un punto de parada para los galeones españoles que regresaban a España. Felipe II de España concedió a La Habana el título de capital en 1592[7]. Se construyeron murallas y fuertes para proteger la ciudad antigua[8] El hundimiento del acorazado estadounidense Maine en el puerto de La Habana en 1898 fue la causa inmediata de la Guerra Hispanoamericana[9].
La ciudad es el centro del gobierno cubano, y alberga varios ministerios, sedes de empresas y más de 100 oficinas diplomáticas.[10] El gobernador es Reinaldo García Zapata, del Partido Comunista de Cuba (PCC).[11][12] En 2009, la ciudad/provincia tenía el tercer ingreso más alto del país.[13]
La habana antigua
La larga y rica historia de La Habana se remonta a la época de Cristóbal Colón. En 2019 se cumplirá el 500 aniversario de la fundación de esta ciudad en la isla de Cuba, en el Caribe. Por su situación estratégica, no es de extrañar que sea una ciudad especialmente rica en fortalezas. Cuatro de ellas se alzan a la vista a ambos lados de la bahía que desemboca en el puerto de La Habana.
¿Por qué tantas fortalezas? En 1511, Diego Velázquez de Cuéllar reclamó Cuba para España. Rápidamente se establecieron siete ciudades, llamadas villas, entre ellas La Habana, en el oeste de Cuba. En poco tiempo, La Habana se convirtió en un importante puerto para los barcos que regresaban a España cargados de oro mexicano y plata peruana. Sus cargamentos los convertían en objetivos principales de los piratas que surcaban las aguas del Caribe.
Después de que el pirata francés Jacques de Sores quemara un fuerte de La Habana y gran parte de la ciudad en 1555, se construyó una fortaleza más fuerte cerca de la entrada de la bahía. El Castillo de la Real Fuerza se terminó en 1577 y es la más antigua de las cuatro fortalezas que se construyeron para proteger la bahía.