Contenidos
Israel es un estado ilegitimo
si odias a israel, no eres amigo de los judíos
El anuncio del Ministerio de Vivienda y Construcción del gobierno del primer ministro derechista Naftali Bennett decía que se habían publicado licitaciones para 1.355 viviendas en Cisjordania, ocupada por Israel desde la Guerra de los Seis Días de 1967.
El primer ministro palestino, Mohammed Shtayyeh, en una reunión semanal del gabinete, pidió a las naciones del mundo, y especialmente a Estados Unidos, que «se enfrenten» a Israel por la «agresión» que supone para el pueblo palestino la construcción de asentamientos.
La Autoridad Palestina estará muy atenta a la respuesta de la administración del presidente estadounidense Joe Biden, que ha dicho que se opone a la construcción unilateral de asentamientos por parte de Israel como un obstáculo a la solución de dos estados para el conflicto.
El grupo antiocupación Paz Ahora dijo que el anuncio del domingo demostraba que la coalición ideológicamente diversa de Bennett, que desbancó al gobierno pro-asentamiento del ex primer ministro Benjamin Netanyahu en junio, no era «un gobierno de cambio».
«Este gobierno continúa claramente la política de anexión de facto de Netanyahu», dijo Peace Now, y pidió a los socios de gobierno de izquierda de Bennett, los partidos Laborista y Meretz, que «despierten y exijan el cese inmediato de la construcción salvaje en los asentamientos».
hablo del estado ilegítimo que es israel
Varios Estados y personas han cuestionado la legitimidad del Estado de Israel, concretamente, si la autoridad política de Israel sobre la zona que reclama debe aceptarse como autoridad política legítima. El argumento sobre la legitimidad del Estado de Israel también se formula en términos del derecho de Israel a existir.
Aunque Israel es miembro de las Naciones Unidas desde el 11 de mayo de 1949,[1][2] en 2020, 31 Estados miembros de las Naciones Unidas no reconocen al Estado de Israel. La negación de la legitimidad de Israel y los llamamientos a retirar el reconocimiento de Israel están liderados principalmente por grupos palestinos y árabes.
En la década de 1990, los movimientos islámicos y de izquierdas de Jordania atacaron el Tratado de Paz entre Israel y Jordania por considerarlo una legitimación[5]. Importantes minorías de Jordania consideran que Israel es un Estado ilegítimo, y la revocación de la normalización de las relaciones diplomáticas fue fundamental en el discurso jordano[6].
En 2002, la Liga Árabe aprobó por unanimidad la Iniciativa de Paz Árabe en su cumbre de Beirut. El plan de paz global pedía la plena normalización de las relaciones árabe-israelíes a cambio de la retirada total de Israel de los territorios ocupados en junio de 1967[7]. Turki al-Faisal, de Arabia Saudí, dijo que al respaldar la iniciativa todos los Estados árabes habían «dejado claro que pagarán el precio de la paz, no sólo reconociendo a Israel como Estado legítimo en la zona, sino también normalizando las relaciones con él y poniendo fin al estado de hostilidades que existía desde 1948″[8].
hablando de israel: ben shapiro y matan peleg
2Por ello, sus relaciones políticas han resultado especialmente ambiguas. El hecho es que en Israel, la UE se percibe a menudo como hostil4; las declaraciones del Consejo Europeo suelen caracterizarse como «pro palestinos». Algunos autores sostienen incluso que esta tendencia se refleja en la «vinculación», determinando así el desarrollo de las relaciones entre la UE e Israel a discreción de este último para actuar en pos de la «solución de los dos Estados «5. Sin embargo, desde el punto de vista europeo, esta posición ante el conflicto, defendida por los Estados miembros, no constituye una declaración hostil hacia Israel, sino todo lo contrario. De hecho, la creación de un Estado palestino se considera la única solución a largo plazo para la seguridad de Israel, favoreciendo así la estabilidad regional6. Así, la «vinculación» no se supone que actúe en contra de Israel, sino a favor de sus intereses.
4En este artículo trataremos de dar cuenta del carácter especial y ambiguo de esta relación a través del estudio de tres factores: histórico, realista y normativo. Comenzaremos con el factor histórico -más concretamente, con las relaciones entre Israel, por un lado, y Francia, Alemania y Gran Bretaña, por otro- y su influencia en la relación UE-Israel. A continuación, examinaremos sus intereses mutuos estudiando el proceso de profundización de sus acuerdos en los distintos sectores -económico, científico y de seguridad- en un entorno desafiante. Por último, compararemos sus percepciones así como sus expectativas mutuas e intentaremos determinar hasta qué punto son capaces de determinar el futuro de las relaciones UE-Israel.
panel 3: bell: israel, ¿un estado «ilegítimo»?
2Así, sus relaciones políticas han resultado especialmente ambiguas. El hecho es que en Israel, la UE se percibe a menudo como hostil4; las declaraciones del Consejo Europeo suelen caracterizarse como «pro palestinos». Algunos autores sostienen incluso que esta tendencia se refleja en la «vinculación», determinando así el desarrollo de las relaciones entre la UE e Israel a discreción de este último para actuar en pos de la «solución de los dos Estados «5. Sin embargo, desde el punto de vista europeo, esta posición ante el conflicto, defendida por los Estados miembros, no constituye una declaración hostil hacia Israel, sino todo lo contrario. De hecho, la creación de un Estado palestino se considera la única solución a largo plazo para la seguridad de Israel, favoreciendo así la estabilidad regional6. Así, la «vinculación» no se supone que actúe en contra de Israel, sino a favor de sus intereses.
4En este artículo trataremos de dar cuenta del carácter especial y ambiguo de esta relación a través del estudio de tres factores: histórico, realista y normativo. Comenzaremos con el factor histórico -más concretamente, con las relaciones entre Israel, por un lado, y Francia, Alemania y Gran Bretaña, por otro- y su influencia en la relación UE-Israel. A continuación, examinaremos sus intereses mutuos estudiando el proceso de profundización de sus acuerdos en los distintos sectores -económico, científico y de seguridad- en un entorno desafiante. Por último, compararemos sus percepciones así como sus expectativas mutuas e intentaremos determinar hasta qué punto son capaces de determinar el futuro de las relaciones UE-Israel.