Uso de armas en estados unidos

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En general, alrededor de un tercio de los propietarios de armas dicen que van a cazar a menudo (12%) o a veces (22%), mientras que aproximadamente la mitad dicen que van a disparar o a un campo de tiro con cierta frecuencia (13% a menudo, 40% a veces). Entre los que poseen un arma de fuego, aproximadamente uno de cada cuatro (26%) lleva su arma fuera de casa todo o casi todo el tiempo, y un 31% adicional dice que la lleva algunas veces.

Los propietarios de armas están divididos en cuanto a la importancia de poseer un arma para su identidad general. Uno de cada cuatro dice que es muy importante, mientras que el resto lo considera algo importante o no importante. Los que dicen que ser propietario de un arma es muy importante para su identidad son casi unánimes en su creencia de que el derecho a poseer un arma es esencial para su libertad personal.

Muchos propietarios de armas, aunque no todos, se encuentran en un contexto social en el que la posesión de armas es la norma. Aproximadamente la mitad de los propietarios de armas dicen que todos o la mayoría de sus amigos tienen armas. Otro 38% dice que algunos de sus amigos tienen armas y el 13% dice que sólo unos pocos. En marcado contraste, entre el público que no posee armas, sólo uno de cada diez dice que todos o la mayoría de sus amigos poseen armas. Estas conexiones sociales están fuertemente ligadas al uso de armas, ya que los propietarios de armas que dicen que todos o la mayoría de sus amigos tienen armas participan con más frecuencia en la caza y el tiro deportivo que aquellos con menos amigos que tienen armas.

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Según la Constitución de los Estados Unidos, “el derecho del pueblo a poseer y llevar armas no será infringido”. Inscritas en el tejido social de la nación, las armas de fuego se han convertido en sinónimo de las libertades y la cultura estadounidenses. Sin embargo, la relación con las armas y el pueblo de Estados Unidos se ha vuelto cada vez más complicada en la América moderna. Estados Unidos parece ir a la zaga del cambio social, ya que otras naciones desarrolladas se han propuesto frenar la posesión de herramientas inicialmente diseñadas como instrumentos de muerte.

En 2020, una encuesta reveló que alrededor del 42% de los hogares estadounidenses declararon poseer una o más armas de fuego. Esto convierte a Estados Unidos en la población civil más armada del mundo. Una encuesta diferente de 2018 encontró que el 18 por ciento de los propietarios de armas declararon que llevan un arma sobre sí mismos diariamente, mientras que sólo el 42 por ciento de los propietarios de armas declararon que nunca llevan un arma.

La mayoría de los hombres encuestados, el 51 por ciento, afirma vivir en un hogar con armas, y el 45 por ciento posee personalmente un arma. En el caso de las mujeres, estas cifras son ligeramente inferiores. La posesión de armas es una cuestión muy partidista en Estados Unidos, ya que los republicanos apoyan el derecho de todos los estadounidenses a poseer un arma, mientras que los demócratas tienden a favorecer políticas de control de armas más estrictas. Teniendo esto en cuenta, no es de extrañar que el 64% de los republicanos afirme vivir en un hogar con armas, mientras que sólo el 31% de los demócratas dice lo mismo. La posesión personal de armas es bastante baja para los demócratas, con un 18 por ciento que declara poseer un arma en 2020.

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Los datos proceden de dos encuestas nacionales de marcación aleatoria realizadas por Fact Finders, Inc en la primavera de 1996 y en la primavera de 1999. Las muestras comprenden, respectivamente, 1.905 y 2.521 adultos que viven en los 50 estados.

Las muestras se estratificaron por estados, y el número de entrevistas designado para cada estado se determinó en función de la población de ese estado en relación con la población total según el censo de 1990. Todos los hogares con una sola línea telefónica, incluidos los que tenían números no registrados, tenían la misma probabilidad de ser incluidos en la muestra. Los hogares sin teléfono fueron excluidos de la muestra.

No se entrevistó a más de un adulto de cada hogar. En lugar de entrevistar al adulto que se encontraba en casa en el momento de la llamada, los entrevistadores pidieron alternativamente hablar con un hombre o con una mujer que viviera en el hogar. Si no había ningún adulto que viviera en el hogar del sexo solicitado, se entrevistaba al encuestado inicial. Los resultados muestran datos no ponderados.

Una vez seleccionado un número de teléfono al azar, se repitieron hasta 10 llamadas telefónicas hasta que se asignó una disposición final. En 1996, el 27% de los hogares contactados se negó a participar en la encuesta; en 1999, el 35% se negó. Estas tasas de respuesta son comparables a las de otras encuestas sobre el uso de armas de autodefensa.11,12

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¿Qué es una lesión por arma de fuego? Una lesión por arma de fuego es una herida de bala o una lesión penetrante por un arma que utiliza una carga de pólvora para disparar un proyectil. Por ejemplo, esta definición incluye las lesiones por disparo de:

¿Qué tan comunes son las lesiones por arma de fuego?Las lesiones por arma de fuego son un grave problema de salud pública. En 2019, se produjeron 39.707 muertes relacionadas con armas de fuego en Estados Unidos, lo que supone que cada día mueren unas 109 personas por una lesión relacionada con un arma de fuego. Seis de cada 10 muertes fueron suicidios con armas de fuego y más de 3 de cada 10 fueron homicidios con armas de fuego.

Hay más personas que sufren lesiones no mortales relacionadas con las armas de fuego que las que mueren. Siete de cada 10 lesiones por arma de fuego tratadas médicamente son por agresiones relacionadas con armas de fuego, y 2 de cada 10 son lesiones por arma de fuego no intencionadas. Son pocas las lesiones relacionadas con armas de fuego autoinfligidas intencionadamente que se ven en los servicios de urgencias de los hospitales. La mayoría de las personas que utilizan un arma de fuego en un intento de suicidio, mueren a causa de su lesión.

Algunos grupos tienen mayores tasas de lesiones por arma de fuego que otros. Los hombres representan el 86% de todas las víctimas de muerte por arma de fuego y el 87% de las lesiones no mortales por arma de fuego. Las tasas de violencia con armas de fuego también varían según la edad y la raza/etnia. Las tasas de homicidio por arma de fuego son más altas entre los adolescentes y los adultos jóvenes de 15 a 34 años de edad, y entre las poblaciones negra, india americana/nativa de Alaska e hispana. Las tasas de suicidio con armas de fuego son más altas entre los adultos de 75 años o más y entre las poblaciones de indios americanos/nativos de Alaska y blancos no hispanos.

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